El IRPF es un impuesto progresivo que varía en función de cada trabajador, sus retenciones se consideran adelantos que se hacen a Hacienda antes de su declaración de la renta. Te contamos cómo calcularlas.
El Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) es uno de los tributos que tienen que pagar todos los trabajadores españoles de manera regular. Cada mes, la Agencia Tributaria extrae del salario bruto de la nómina de los contribuyentes un porcentaje que se conoce como retención.
Ésta desempeña un papel fundamental en la cantidad que un individuo deberá pagar o que recibirá al hacer su declaración de la renta. La cantidad de retención influye en la cantidad de dinero que un trabajador recibirá en su nómina.
En este artículo te contamos más los principales aspectos a tener en cuenta para calcular la retención de IRPF.
¿Qué es el IRPF?
Antes de explicar las retenciones, es importante saber bien qué es el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
Según el artículo 1 de la Ley 35/2006, el IRPF «es un tributo de carácter personal y directo que grava, según los principios de igualdad, generalidad y progresividad, la renta de las personas físicas de acuerdo con su naturaleza y sus circunstancias personales y familiares».
De este impuesto, el Estado español recauda dinero según los ingresos obtenidos, para la manutención y cumplimiento de las funciones sociales y políticas del país.
¿Cómo funcionan las retenciones?
Si la retención en la nómina es baja, el trabajador recibirá un salario mayor, pero tendrá que pagar una suma significativa en su declaración de impuestos. Por el contrario, si la retención es alta, Hacienda reembolsará al contribuyente el excedente de lo que haya pagado después de realizar los cálculos necesarios.
Es común que algunos trabajadores soliciten un aumento en esta retención, con la esperanza de que su ajuste fiscal con la Agencia Tributaria resulte más favorable. Sin embargo, es importante destacar que esta retención no puede ser disminuida por debajo de un cierto umbral, el cual está establecido por la Agencia Tributaria.
La retención mínima del IRPF es del 2% y no puede ser inferior a ese porcentaje en contratos de duración inferior a un año (0.8% para trabajos realizados en Ceuta o Melilla). Cabe resaltar que los trabajadores que tienen múltiples empleadores durante el año deben asegurarse de que la retención del IRPF en sus nóminas sea acorde con sus ingresos para evitar sorpresas desagradables en su declaración de impuestos.
Lo ideal es que las retenciones sean lo más precisas posible y se ajusten al monto final que se debe a Hacienda.
¿Qué se tiene en cuenta para calcular el IRPF en la nómina?
Si alguna vez has visto tu nómina en detalle, verás que en el desglose aparecen reflejados todos los ingresos brutos (salario base, complementos, pagas extra, etc.) y todas las deducciones que se le aplican mensualmente (retenciones en forma de impuestos o cotizaciones, entre los que se incluye el IRPF).
Pues, con base en esos datos, la Agencia Tributaria tiene establecidas unas tasas en función de los ingresos, aunque son las empresas las que finalmente establecen el porcentaje de retención, y el trabajador puede solicitar un aumento o una disminución en la retención del IRPF en su nómina.
Como mencionamos anteriormente, estos son los casos en los que se retiene un IRPF del 2% en la nómina, por ejemplo:
- Contratos temporales de duración inferior a un año.
- Contratos de prácticas.
- Convenios con becarios.
- Actividades agrícolas, ganaderas y forestales.
Hay que tener cuidado porque la retención mínima de IRPF NO se aplica a contratos indefinidos ni a los fijos discontinuos. Las tasas de retención son progresivas, lo que significa que cuanto más se gana, más se retiene. Para el año 2023, las tasas del IRPF son las siguientes:
- Hasta 12,450 euros: 19%.
- De 12,450 euros a 19,999 euros: 24%.
- De 20,200 euros a 35,199 euros: 30%.
- De 35,200 euros a 59,999 euros: 37%.
- De 60,000 euros a 299,999 euros: 45%.
- A partir de 300,000 euros: 47%.
Igualmente, existen otros elementos que pueden influir en el cálculo del IRPF:
- Salario bruto anual: como es un impuesto progresivo, cuanto más alto sea el sueldo, más retención se aplicará.
- Tipo de contrato: varía en función de si es indefinido o, por ejemplo, temporal.
- Lugar de residencia: aunque la base es la misma en todo el territorio español, el porcentaje depende de cada Comunidad Autónoma.
- Discapacidad: dependiendo del grado de discapacidad, el IRPF varía.
- Situación familiar: varía dependiendo si se tiene hijos, si son familias numerosas, monoparentales, etc.
Tasas por tramos
Es importante recordar que las tasas de retención se aplican por tramos, lo que significa que si una persona gana, por ejemplo, 65.000 euros al año, no se le retendrá un 45% sobre el total, sino un 45% sobre la cantidad que excede el límite del tramo y un 37% sobre el monto restante dentro del tramo de 24.800 a 60.000 euros.
¿Cómo se calcula el IRPF?
Finalmente, para calcular el IRPF hay que hacer las siguientes cuentas:
- Salario base + pagas extra.
- Base de IRPF x el porcentaje de retención = deducción del IRPF.
- El tipo de retención es el resultado de la suma del Salario base + pagas extra multiplicado por el porcentaje que sale de la deducción del IRPF.
Esperamos que esta información te haya sido muy útil para calcular la retención del IRPF en tu nómina y que no resulten errores. Por otro lado, hay muchos trámites relacionados con impuestos y la Agencia Tributaria que se pueden hacer vía telemática con certificado digital, esta herramienta te ayudará a resolver mucho papeleo burocrático que te podrás encontrar en el futuro en las administraciones públicas.
Consíguelo en minutos y, si quieres con ayuda, en CertificadoElectronico.es.