¿Qué sabes sobre las encuestas del INE? ¿Te ha llegado una carta para participar en una encuesta del INE? ¿Estás obligado a responderlas?
No te sorprendas si en el buzón de tu casa recibes una amigable misiva en la que el Instituto Nacional de Estadística te comunica que has sido seleccionado como “voluntario obligatorio” para contestar a unas cuantas preguntas. Siéntate y sigue leyendo, pues vas a necesitar tiempo para cumplir con esta colaboración a un bien común.
¿Qué son las encuestas del INE?
Que todos hemos escuchado hablar del Instituto Nacional de Estadística (INE), de sus censos y de sus estadísticas es algo que no podemos negar; el constante ir y venir de datos, porcentajes, índices de precios y niveles de productividad nos recuerdan que estamos en una sociedad en la que todo se mide y del resultado de dichas mediciones dependerá en gran medida las decisiones que tomen nuestros gobernantes. Las estadísticas oficiales son una de las principales fuentes de información sobre la marcha de nuestra sociedad.
El INE es un organismo autónomo de carácter administrativo, con personalidad jurídica y patrimonio propio, adscrito al Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital y su principal función es la de elaborar “estadísticas”, que tendrán carácter oficial y que son imprescindibles para que las administraciones públicas, las empresas y otros agentes sociales puedan tomar las decisiones más apropiadas, cada uno en su ámbito de actuación.
Estas estadísticas para la población en general, sirven como indicativas de la marcha y evaluación de las políticas de los gobiernos y otros de estos recuentos tiene un marcado carácter legal, pues en ellos se basan muchas de las variables que rigen nuestras vidas y nuestro bienestar.
Y quienes se pregunten cómo se elaboran estas estadísticas tendrán que saber que el INE “tira de listas” para elaborarlas, la información la obtiene de mano de la misma población por dos posibles vías: bien a través de los censos, bien a través de las encuestas. En un censo se investiga a todas las unidades que componen la población, pero las encuestas se ciñen sobre una parte de la población, es decir, se toma una “muestra”, una fotografía de parte del paisaje que después será extrapolable al resto.
Desde que en 1989, la Ley de Función Estadística Pública entrase en vigor, el Estado estableció que habría ciertas estadísticas que iban a ser de obligado cumplimiento por parte del ciudadano de a pie, los que conforman los hogares de nuestra sociedad, o bien por empresas seleccionadas en función a varias características de estas. Y desde entonces, la ayuda desinteresada que debemos prestar a este Instituto es una obligación inexcusable, cuando te toque, bajo amenaza de sanción económica si no colaboras.
¿Puedo rechazar esta invitación a cumplimentar una encuesta?
La respuesta es que no. La primera pista que la administración te dará para indicarte que has sido seleccionado para cumplimentar esta encuesta será el envío de una carta para posteriormente confirmarte por teléfono que efectivamente tu obligación es la de cumplimentarla y enviarla.
La forma de cumplimentar estas preguntas será dando respuestas e información de forma veraz, exacta y completa, y para muchos resulta una labor engorrosa y francamente pesada, pues en la mayoría de las veces el número de cuestionarios es bastante elevado, lo que te llevará parte de tu tiempo contestar a todos.
Las encuestas pueden ir dirigidas a hogares o a empresas y en ambos casos, la renuncia a responderlas se sancionará económicamente si se trata de una de las encuestas incluidas en el Plan Estadístico Nacional o de las que resultaran obligatorias para el Estado español por exigencia de la normativa de la Unión Europea; su obligatoriedad y el plazo para hacerlo serán informados en la carta que recibamos.
Sanciones si no respondes
Si no contestas o lo haces de forma incorrecta, incompleta o fuera de plazo, estarás cometiendo una infracción que lleva aparejada sanciones que se pueden mover en un rango que va desde los 60 euros a los 30.000 euros. La clasificación de estas infracciones serán leves, graves o muy graves.
Son infracciones muy graves:
- El incumplimiento del deber del secreto estadístico.
- La utilización para finalidades distintas de las estadísticas de los datos personales obtenidos directamente de los informantes por los servicios estadísticos.
- El suministro de datos falsos a los servicios estadísticos competentes.
- La resistencia notoria, habitual o con alegación de excusas falsas en el envío de los datos requeridos, cuando hubiere obligación de suministrarlos.
- La comisión de una infracción grave cuando el infractor hubiere sido sancionado por otras dos graves dentro del período de un año.
Son infracciones graves:
- La no remisión o el retraso en el envío de los datos requeridos cuando se produjese grave perjuicio para el servicio, y hubiere obligación de suministrarlos.
- El envío de datos incompletos o inexactos cuando se produjese grave perjuicio para el servicio, y hubiere obligación de suministrarlos.
- La comisión de una infracción leve cuando el infractor hubiera sido sancionado por otras dos leves dentro del período de un año.
Son infracciones leves:
- La remisión o el retraso en el envío de datos cuando no hubiere causado perjuicio grave para el servicio, y hubiere obligación de suministrarlos.
- El envío de datos incompletos o inexactos cuando no hubiere causado perjuicio grave para el servicio, y hubiere obligación de suministrarlos.
Cómo contestar las encuestas del INE
No debes preocuparte por el destino que el INE otorgue a tus respuestas, las mismas son absolutamente confidenciales y están protegidas por el secreto estadístico; ninguno de los datos individuales o personales que se viertan en estas encuestas serán cedidas a terceros ni tampoco a otras administraciones (si bien, existe una excepción, y para evitar que el informante tenga que dar datos por duplicado, se podrán ceder información a otros organismos que elaboren estadísticas siempre que garanticen el mismo nivel de protección de los datos).
En la carta que recibamos previamente a la llamada telefónica, (o incluso, podemos recibir la visita de un entrevistador que se identificará debidamente), se incluye un código numérico que el informante puede solicitar cuando recibe la llamada con el fin de verificar que se le llama desde el INE.
La encuesta se puede cumplimentar por internet, en cuyo caso se incluirá una clave, bien por correo postal o por teléfono.
Si la optamos por la vía digital, necesitaremos un certificado digital reconocido y lo haremos accediendo a la herramienta IRIA que el INE utiliza para la realización de encuestas a través de internet.¿Aún no tienes tu certificado digital? Consíguelo en CertificadoElectronico.es y si quieres, más rápido y con ayuda para instalarlo.
Lo primero que debemos hacer al acceder con nuestro certificado digital, es seleccionar la encuesta para que hemos sido seleccionados en un desplegable dentro del sistema IRIA; iremos grabando todas nuestras respuestas y enviaremos nuestra participación.
Es importante que te tomes tu tiempo para realizar este noble trabajo que a todos nos beneficia, no obstante, la administración no hará, sino “agradecerte tu colaboración” una vez hayas finalizado tu labor, que será tan importante como, por ejemplo, la determinación del Producto Interior Bruto (PIB) para el que se utilizan datos obtenidos de las Encuestas de Población Activa, Encuesta de Presupuestos Familiares, Encuestas Industrial de Empresas, Encuesta Anual de Servicios, Encuesta de Estructura de Industria de la Construcción, etc.
