¿Qué son los impuestos verdes o medioambientales? “Quién contamina, paga” este es el alma que imprime el carácter de los llamados impuestos verdes o medioambientales. Emisiones contaminantes, residuos tóxicos, reducción de la capa de ozono… conceptos que nos resulta tan familiares como alarmantes en muchas ocasiones.
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La fiscalidad verde o medioambiental
Fue a mediados del siglo XX cuando los países desarrollados, y entre ellos el nuestro, comenzaron a evidenciar una grave preocupación por la conservación del entorno que nos rodea, la extinción de las especies y el cambio climático.
La sostenibilidad de los recursos naturales y hacer un uso más racional y eficiente de las energías están en el punto de mira de las políticas medioambientales de los países de nuestro entorno más cercano.
Y como un pilar fundamental de esta concienciación global, nace la necesidad de crear un sistema impositivo que, según la Unión Europea, está destinado a contribuir, entre otras medidas, a mitigar el llamado cambio climático y ayudar a la reducción de la emisión de gases de efecto invernadero en al menos un 55% de aquí al año 2030 y conseguir que en 2050 la Unión Europea sea “climáticamente neutra”, y esto significa que todos los países tenemos que disminuir drásticamente nuestras emisiones contaminantes compensándolas de modo que alcancemos un equilibrio de cero emisiones netas.
La emergencia climática ya está declarada y nuestro futuro depende de la salud del planeta.
Este joven sistema impositivo tiene una máxima: las empresas que más contaminen son las que más tienen que pagar. Así sin más. La aplicación del Pacto Verde Europeo implica también el uso de herramientas fiscales como clave para generar recursos de otro tipo y que son necesarios para la reconstrucción verde de Europa.
Se trata de implementar un modelo de recaudación que vaya más allá de los conocidos impuestos sobre las rentas, el trabajo, el capital o el ahorro; una fiscalidad que incentive a los ciudadanos, corporaciones y empresas para llevar a cabo comportamientos más sostenibles en sus actividades personales, empresariales o industriales.
Qué gravan los impuestos verdes
Los impuestos verdes o medioambientales tienen como objetivo “castigar” aquellas actividades que sean más dañinas y perjudiciales para el medio ambiente, y según la Oficina Estadística de la Unión Europea, la llamada “Eurostat”, del total de los ingresos que proceden de la recaudación de impuestos, solo un 5,35% lo son por impuestos medioambientales.
España está más bien a la cola en su posición recaudatoria, estando por debajo de la media, durante el año 2021, según el Instituto Nacional de Estadística, los impuestos ambientales alcanzaron los 21.265 millones de euros en 2021, un 8,5% más que en el año anterior. Representaron el 7,2% del total de impuestos de la economía española y de estos, los hogares pagaron el 44,4% del total de impuestos ambientales.
Los impuestos medioambientales gravan, entre otras cosas, las siguientes:
- Las emisiones de monóxido de nitrógeno y dióxido de nitrógeno que se producen sobre todo desde el escape de los vehículos.
- Emisiones de dióxido de azufre (SO2) que es el principal causante de la lluvia ácida y se produce en la combustión del carbón, el petróleo, el diésel o el gas natural.
- Emisiones de sustancias que reducen la capa de ozono.
- La recogida y tratamiento de residuos contaminantes del agua.
- La gestión de residuos.
- El ruido (despegue y aterrizaje de aviones).
- Los productos energéticos.
- Transporte. Impuestos sobre las importaciones o ventas de vehículos de motor. Matriculación o uso de vehículos de motor.
- El uso y consumo de recursos naturales. Captación de agua, extracción de materias primas(excepto petróleo y gas) y otros recursos (bosques)
Cuáles son los impuestos ambientales en España
El Ministerio de Hacienda y Función Pública, a través de la Sede Electrónica de la Agencia Tributaria, determina el total de modelos que dentro del sistema impositivo español se consideran Impuestos Ambientales y están en vigor. ¿Ya tienes tu certificado digital para hacer todas las gestiones que necesites en su sede electrónica? Consíguelo online con CertificadoElectronico.es
Entre otros, se encuentra los siguientes:
- Impuestos sobre hidrocarburos: grava el valor de la extracción de gas, petróleo y condensados.
- Impuestos sobre la electricidad: gravan el valor de la producción de energía eléctrica.
- Impuesto envase de plástico: grava los envases de plástico no reutilizables.
- Impuesto. Especial de la C. A. de Canarias sobre combustibles derivados del petróleo.
- Impuesto especial sobre determinados medios de transporte.
- Impuesto sobre vehículos de tracción mecánica.
- Impuesto sobre la producción de combustible nuclear y residuos radioactivo.
- Impuestos sobre Gases Fluorados efecto invernadero.
- Impuesto sobre el depósito de residuos en vertederos, la incineración y la coincineración de residuos.
